Los tipos de dependencia emocional más comunes son los de dependencia hacia la pareja, la ex pareja, la familia, las amistades y también la dependencia emocional en el entorno laboral.
Cada una de ellas presenta diferentes características y evolucionan de diferente manera en el tiempo.
El factor característico en todas las personas que presentan estos rasgos es el de falta de autoestima y valía personal.
Dependencia emocional a la pareja.
Este tipo de dependencia se caracteriza por la necesidad de complacer a la otra persona incluso anteponiendo los propios interés y valores.
En estos casos, la persona afectada ve su vida limitada ante las imposiciones creadas por la pareja o por uno mismo a la hora de realizar diferentes actividades o incluso a la hora de pensar y sentir.
Es propio de personas con falta de autoestima que necesitan la aprobación constante y la necesidad de pedir ayuda y consejo en cada uno de los problemas que puedan surgir.
Los síntomas asociados a este tipo de dependencia se asemejan a los que presenta un adicto a las drogas.
Necesitan tener contacto tanto físico como emocional con su pareja y se sienten perdidos cuando la pareja está ausente.
Las personas con este tipo de dependencia pueden presentar incluso síntomas de abstinencia en el caso de una ruptura o separación física.
Tienen una actitud obsesiva con sus parejas y pueden intentar controlar cada uno de sus actos o sentimientos con el fin de tenerlas siempre cerca.
Dependencia emocional hacia la pareja
En este tipo de dependencia se presenta una actitud dominante hacia la pareja.
No acepta la ruptura e intenta por todos los medios conocer que hace en cada momento y volver a tener algún tipo de contacto con ella.
Suelen presentar cierta obsesión con sus redes sociales que visitan una y otra vez para ver nuevas publicaciones que le permitan conocer con quién está, qué hace o cómo se siente.
Dependencia emocional hacia los progenitores
En la mayoría de los casos la dependencia emocional se suele centrar en la figura materna.
La persona afectada tiene la necesidad de ser aprobada de manera constante por su madre y pide ayuda ante el menor imprevisto.
Es característico de personas con un apego inseguro durante la infancia donde la madre o figura de autoridad no le ha ofrecido las herramientas necesarias para valerse por sí mismo.
Estas herramientas son la confianza y la seguridad en uno mismo para realizar diferentes actividades o resolver problemas.
Dependencia emocional en amistades
En este tipo de dependencia la persona siente la necesidad de compartir cada una de sus vivencias e incluso emociones con su amistad.
Esto puede generar un clima hostil al ver como la persona invade su intimidad y no le ofrece la libertad que todo el mundo necesita.
Las relaciones de dependencia emocional se basan en relaciones insanas que no propician la libertad de expresión y generan sentimientos de necesidad de apego constante.
Es común que la persona afectada tenga celos de otras amistades que pueda haber y se enfaden cuando la persona se ve con alguien sin contar con ella.
Dependencia emocional en relaciones laborales
La dependencia emocional en el entorno laboral se caracteriza por la necesidad de satisfacer en todo momento los deseos del jefe o encargado.
Este tipo de personas vive por y para su trabajo y se encuentran perdidas cuando no están realizando sus funciones o se encuentran de vacaciones.
No saben desconectar y llevan los problemas de su trabajo a su entorno familiar.
Dependencia emocional en hombres ¿puede pasar?